Una de las mejores formas de celebrar la noche más corta del año es disfrutar de ella en autocaravana, dado que, con ella, podremos acercarnos a cualquier punto de la península a disfrutar de una de las tradiciones más longevas de cuantas se festejan en España: el San Juan, una celebración de origen celta con la que, previamente a la llegada del cristianismo a Hispania, ya se daba la bienvenida al solsticio de verano.
Se trata, por tanto, de una noche noche mágica, en la que, según la tradición, todas las aguas tienen virtudes curativas. De ahí que, en muchos lugares, se apueste por bañarse (en el mar o en el río) como método de sanación o para favorecer la fertilidad. Por tanto, un destino perfecto es, sin lugar a dudas, la playa pontevedresa de A Lanzada, situada entre O Grove y Sanxenxo, en la que, como cada año, mujeres que buscan ser madres se adentrarán en el Atlántico para saltar nueve olas, tal y como manda la tradición.
Pero, quienes prefieren la fiesta, seguramente se decantarán por otras propuestas como el San Juan de A Coruña, en el que habrá desfile de meigas y en el que, antes de que se enciendan las hogueras, habrá también quien participe en la habitual recogida de las hierbas mágicas que refuerzan sus propiedades en la noche más corta del año.
El principal referente en San Juan es, sin lugar a dudas, el fuego, por lo que serán las hogueras las principales protagonistas de la noche en prácticamente cada rincón de la geografía española.
Son especialmente conocidas las fogueres de San Joan, en Alicante, donde desde 1928 se preparan para esa noche auténticos monumentos artesanales para su quema; las del San Juan de Barcelona (donde, además, se podrá degustar la coca de San Juan); la quema del Jua en Andalucía, para celebrar la noche bruja; o el ritual de San Pedro Manrique, en Soria, donde se prepara una hoguera en la que arderán dos toneladas de madera de roble cuyas brasas, finalmente, conformarán una alfombra que servirá para el paso del fuego, con los pies desnudos.
En todo caso, las propuestas son múltiples y muy variadas, por lo que, seguramente, no sea preciso recorrer demasiados kilómetros para disfrutar de alguna alternativa interesante. Eso sí, hacerlo en autocaravana, permitirá alargar al máximo la madrugada y tener todo dispuesto, casi a pie de hoguera, para, en cuanto amanezca, continuar con los rituales; entre ellos, el de ver "bailar" el sol (una costumbre especialmente arraigada en Galicia) o el lavarse la cara con agua de flores para acrecentar, con ello, la belleza.